mayo 02, 2008

Primero de mayo en una escuela


El maestro como político Así me planteo mi trabajo. Estoy convencido de la necesidad urgente de romper con el espíritu de cuerpo que rige en los claustros. Es así que planteo la tarea docente como una actividad política directa entre las masas. La reunión de padres como asamblea, como Cabildo Abierto, el acto escolar como tribuna, las clases como lugar de encuentro construcción y circulación del poder y el saber. Junto al pueblo, compartiendo. Hoy tuve la oportunidad de leer un discurso con motivo del 1º de mayo. Al finalizar varios alumnos se acercaron a contarme cuales eran las situaciones laborales de sus papás, una madre me pidió una copia y otra me dijo "hace diez años que esperaba un discurso así". Un par de colegas suscribieron... Aquí el texto...
¿Por qué trabajamos? Desde hace mucho tiempo los trabajadores hemos venido cumpliendo con dos labores simultáneas. Por un lado asistir a nuestros empleos para vender nuestra fuerza de trabajo a cambio de los mínimos medios para sobrevivir. Por otro, y principalmente, trabajamos para producir. Sin el trabajo humano sólo sobrevivirían unos pocos millones de hombres en las zonas subtropicales. La leche natural produce tuberculosis mientras que el trabajo de un solo hombre genera siete mil litros de leche sana y vital, por día, en la planta de La Serenísima. Miles de años de selección cuidadosa de granos fueron necesarios para crear el trigo que hoy conocemos. Sin el trabajo humano este cereal desaparecería de la tierra en tan solo veinticinco años. Hoy, un obrero de Molinos Río de la Plata produce, en doce horas de trabajo, cinco mil quilos de harina.
Por esto trabajamos. Para sobrevivir. Para dominar a la naturaleza. Para producir. Para ser libres trabajamos. Ese es el rasgo más destacado de los seres humanos.
Sin embargo esta particularidad se ha ido transformando hasta tal punto que en pocas ocasiones el trabajo es liberador.
El problema está en la explotación. La gran palabra prohibida. Nadie habla de explotación. No figura en los planes de estudio, ni en la agenda de ningún político, ni en el discurso de ningún medio masivo de comunicación. No se puede hablar de que la inmensa mayoría de los hombres y mujeres de este planeta trabajamos para que unos pocos se hagan ricos. No se puede decir que mientras los obreros dejan sus mejores horas en las fábricas los grandes capitalistas derrochan recursos en frivolidades y lujos vulgares y obscenos
El primero de mayo no es el día del trabajo. Tampoco el día del trabajador. Es, aunque la historia oficial lo desmienta, el día de los que trabajan para otros. De los que no son dueños de lo que producen. El día de los explotados.
El ejercicio de la memoria es inútil si no viene acompañada del pensamiento crítico y de la práctica trasformadora. Es hora de despegarse de los “siempre fue así”.
El racismo, que goza de buena salud en este país, la delincuencia, la corrupción, los privilegios, la guerra, la contaminación y la destrucción del planeta tienen su origen en la explotación. O lo que es lo mismo en la avaricia de los dueños de la tierra y de las grandes industrias.
Hoy recordamos a los luchadores que en 1886 fueron asesinados, de la misma manera que los desaparecidos de aquí, por gritar la verdad. El primero de mayo no reconoce naciones ni fronteras. Es un día internacional. El día de los que no tienen nada y luchan por un mundo justo.
Lucha que más temprano que tarde llegará a buen puerto Porque aunque los pesimistas de siempre digan lo contrario OTRO MUNDO ES POSIBLE. QUE EL PRESENTE SEA NUESTRO YA.

12 comentarios:

Otras Primaveras dijo...

Felicitaciones y adelante en todas sus luchas. Usted tienen la razón, sin dudas.

El Verdugo en el Umbral dijo...

Gracias por el aliento. La razón la tengo de a partes y a momentos gracias a que la construyo junto a los compañeros. EL trabajo de maestro me permite estar en contacto con el Pueblo. En la primer línea de batalla en esta la guerra de clases.
Y en este recorrido vos sos imprescindoble para mí.

Jack Celliers dijo...

Muy buen discurso. Lo que es seguro es que este circo siniestro no tiene futuro. Vamos a arrancarselo de las manos.

El Verdugo en el Umbral dijo...

Gracias Jack Celliers. Se lo arrebataremos definitivamente. Esté seguro. Demos pelea sin tregua. LA urgencia apremia. Porque este circo sin futuro es capaz de arrastrarnos a todos al sin futuro.
Socialismo o el sin futuro

El Verdugo en el Umbral dijo...

Otras: ¿para cuándo un blog de primaveras?

Somos del Agua dijo...

simplemente EXLENTE discurso, felicitaciones

El Verdugo en el Umbral dijo...

Se agradece L. Ese texto es producto de varios días de reflexión y de charlas con compañeros críticos. LA idea era usar esa oportunidad para plantear una tribuna de divulgación política. Era la posibilidad de poner sobre el tapete la cuestión de clase

Anónimo dijo...

CUANTA VERDAD, DEBEMOS TERMINAR CON LOS ENEMIGOS DEL PUEBLO, LOS IREMNOS A BUSCAR HASTA SUS INMUNDAS MADRIGUERAS

El Verdugo en el Umbral dijo...

Así es "anónimo". no va quedar escondite para estos miserables

vocesdelfondo dijo...

Estoy en tratativas de su inicio Verdugo. Este trabajo comprometido me queita tiempo y energía individual, pero ganamos en la lucha del pueblo...

Anónimo dijo...

Que bueno poder sostener el discurso en un ambito tan perverso... A seguir sin caidas ni derrotas.

El Verdugo en el Umbral dijo...

Anónimo/a: creo que sé quien sos. Las críticas que me hacés en otros post me gustan. Son violentas, agresivas como corresponde.
En cuanto a lo que escribís acá gracias por el aliento. Escribir este discurso en un ámbito tan hostil solo pude hacerlo gracias a los compañeros/as que suman.

Saludos cordiales